El Masón
desarrolla el propio trabajo en grupo junto con
los otros Hermanos de Logia, o singularmente. Su
trabajo es de investigación y de construcción.
Para hacer su
tarea, se sirve de los ejemplos y de los consejos
que le dan los otros Hermanos, aunque si, en
virtud de la iniciación, no descuida el aspecto
por el cuál cada quién es maestro de sí mismo.
Para poder
desarrollar su trabajo el Masón usa los
instrumentos que el Arte le
ofrece. Estos son de dos clases. La primera es esotérica, y se refiere a las varias formas
de pensamiento que son incomunicables como la
intuición, la reflexión, la contemplación, la
meditación. Los símbolos, los rituales y las alegorías son medios para facilitar el
enseñamento de las mencionadas formas de
pensamiento. La segunda es exotérica y se
refiere al raciocinio, a la disciplina y al rigor
interior que siempre deben acompañar el trabajo
interior.
Es muy
difícil distinguir una linea de demarcación
entre las dos clases de instrumentos -
esotéricos y exotéricos - de la Masonería. De
todos modos, para poder utilizarlos bien, es
necesario conocer profundamente el Arte que
conlleva el dominio de los métodos especulativo y operativo de la Masonería.
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